El pasado 06 de octubre 2015, nuestra directora Gwenaelle Gerard moderó un interesante panel de empresas nacionales e internacionales durante el 2° Foro Nacional sobre Responsabilidad Social Corporativa en México, organizado por la Secretaría de Economía a través del Punto Nacional de Contacto, y por la SEMARNAT.

Dicho panel contó con la participación de:

Como representantes de empresas líderes en materia de Responsabilidad Social Corporativa, compartieron con la audiencia sus prácticas exitosas en materia de sustentabilidad. Les compartimos 10 de sus recomendaciones:

La empresa es la gente y la gente son sus jefes. Por lo tanto hay que predicar con el ejemplo desde arriba.

La RSE debe ser parte de la forma de gestionar la empresa, hacer parte de la estrategia, del modelo de negocios.

Se debe hacer hincapié en el tema de Gobernanza como elemento central que sustenta las 6 Materias Fundamentales adicionales de la norma ISO 26000 (Medio Ambiente, Prácticas Laborales, Derechos Humanos, Prácticas Justas de Operación, Consumidores, Comunidad) y permite la integración transversal de la Responsabilidad Social en la empresa.

Es importante buscar que haya una relación entre las acciones de RSE y los objetivos del negocio para compensar posibles impactos negativos, incrementar impactos positivos y hasta innovar en los productos. Finalmente se trata de un círculo virtuoso el cual permite asegurar la permanencia de la empresa en el tiempo.

Más allá de la empresa, es necesario extender la RSE a la cadena de suministro extendida, es decir incluyendo no solo los proveedores sino también los clientes

La RSE resulta ser una herramienta de gestión del riesgo: las empresas evalúan el riesgo de actuar o no actuar en torno a ciertas temáticas, expectativas o debilidades.

Más allá de ser una herramienta de gestión del riesgo, permite generar valor para la empresa. No olvidemos que los intangibles representan casi el 70% del valor de una empresa y que la Responsabilidad Social genera justamente mucho valor intangible: un ejemplo es cómo la RSE impacta positivamente en la productividad de los colaboradores.

El éxito de los programas de RSE depende de la colaboración entre distintos actores. Si bien una empresa puede actuar sola, su impacto será limitado. Hay que saber trabajar con los expertos (organizaciones locales, expertos en temas específicos como la salud, etc.)

Al unirse, las empresas de un mismo sector generan un marco de referencia, permiten tener un punto de comparación y entonces hacer benchmarking, y finalmente fomenta una mayor transparencia en el sector además de enseñar el compromiso del sector hacia la mejora continua.

Es necesario contar con sistemas de medición y auditoría de los programas de RSE. Medir para mejorar y auditar para asegurarse de la buena gestión de los fondos.